Wednesday, October 26
COMO LA NOCHE ADENTRO DE LOS OJOS (fragmento)
Alguien corriendo con la cabeza en llamas mientras los dioses soplan en su pecho. El viento lo aviva para todos lados el cansancio se va. Otros caen como árboles. Los hombres piden ayuda al dios de los ratones o al de los ojos de vaca o al que llena el cielo de relámpagos. Esperan que algo los encienda como brasas. Ahora queman las manos y las piernas corren casi por su cuenta. El corazón desborda de vitalidad. Es la misma fiereza de los perros, el arrastre del río y el rayo del sol; el temple del burro, el tornado que levanta las olas por las nubes. Su nombre es ménos, fuerza. La energía que enciende los miembros y calienta la sangre y mueve la vida alrededor. El impulso es un brillo extraordinario, a veces ciego. La fuerza puede ser una explosión vital. También ignora hace pedazos al que tiene enfrente. El viento empuja las piernas y arranca las hojas y aúlla en los oídos del agua. El incendio ilumina y arrasa el bosque está en mi pensamiento ahora. (Daniel Lipara)