Thursday, July 27
IMPERSONALES
Por otro lado, es preciso hablar de los impersonales.
Aquellos en los que el sujeto es una cantidad insondable, casi siempre inmarcesible como el clima o los estados de ánimo del capital:
Hay tráfico.
Anoche a las siete.
Truena antes de llover.
Amanece a las seis.
Quebró la bolsa de valores.
Se enfrió la economía.
Granizó la reserva de oro.
Pereció el peso como lo conocíamos.
(Maricela Guerrero)