Sunday, September 4
NIEBLA La única niebla endémica de mi ciudad es la lluvia; la llevo como un suéter gris entre texturas de otra gente y estampados. Mi única niebla, la de la espera bajo cualquier techo, de coches ciegos, lentos bajo el chubasco, me siembra cataratas en el ojo, esconde los contornos. Es el punto inmóvil al centro del trompo, no me moja, me rodea, esfera al vacío yo adentro, gris apenas, suéter grueso con su olor a húmedo. Es la gasa que impide que mi propia sangre me hiera. (Aurelia Cortés Peyrón)