Sunday, March 24
ESTIVAL, IDA Y VUELTA
Nada hay como remar de noche
por un río negro y conocido
tan negro que la luna reverbera
sobre el perfil tornasolado de los peces
cruzando el caudal antiguo
mil cuchillos arrojados desde el fondo
por una mano ciega.
En este río domado por represas
las ramas se vuelcan mansas lejos de
la orilla, y besan el agua donde
abrevan las luciérnagas que una vez
pareció que nos seguían. Este río
lo cruzamos juntos una noche, desde
una costa de arena hasta la otra de
espinas.
(Mariana Spada)